El registro de marca surgió como el mecanismo más apropiado para proteger la marca que distingue a un producto o servicio de otro, o a una empresa de otra. El uso de las marcas es fundamental en el ámbito empresarial a nivel mundial. Para protegerlas se recurre al registro de marca, que en cada país se hace ante organismos gubernamentales que han sido estructurados para llevar a cabo dicha actividad.
La ventaja o beneficio principal que el registro de marca otorga al titular de la misma, es el de tener la potestad de autorizar o prohibir su uso a terceros. Los diferentes estados o países contemplan instrumentos jurídicos para proteger a los propietarios titulares de las marcas, para que puedan defender su marca ante copias o uso no autorizado. Esos instrumentos de protección abarcan procesos civiles y judiciales.
Al realizar el registro de marca se determina de manera clara y precisa la identidad física, operativa y gráfica del producto o servicio. Así se le proporciona identidad propia en el sector comercial, ya que incluye los elementos visuales y gráficos que le son propios a esa marca, diferenciando el artículo de los competidores. Debe destacarse que una vez realizado el registro de marca, se está ante una identidad registrada y protegida por leyes sobre la materia.
Cada país dicta sus propia legislación, por supuesto atendiendo convenios internacionales universalmente aceptados. Adicionalmente utilizan sus propios términos o denominaciones en cuanto a los tipos de marcas, así como particulares requisitos y condicionamientos que dictan para poder efectuar el registro de marca.
En algunas naciones el procedimiento para el registro de marca suele ser bastante rápido y sin mayores requerimientos. En otras, por el contrario, los lapsos de tiempo que involucra el proceso de registro de marca son muy extensos y el procedimiento es muy laborioso. Está el caso de Colombia, donde en promedio el proceso de registro de marca, puede llevarse seis meses.
El tiempo de tramitación promedio para el registro de marca en Venezuela es de 8 a 12 meses en el caso de marcas denominativas y de 14 a 18 meses para marcas mixtas o figurativas. Si aparecen oposiciones este plazo se extiende de 3 a 10 meses más.
En cuanto a las instituciones para realizar el registro de marca, en Chile está el Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INAPI), en Colombia, la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC). En Venezuela, el registro de marca se realiza a través del Servicio Autónomo de la Propiedad Intelectual (SAPI), organismo adscrito al Ministerio del Poder Popular para el Comercio, que tiene competencia sobre la propiedad intelectual en el país, tanto en materia de Derecho de Autor como de Marcas y Patentes.
Cuando se trata del registro de marca, el objeto sobre el cual se actúa es la marca. Al respecto, la mayoría de los países han asumido la clasificación internacional de Niza, que contempla 5 tipos de marcas, a saber:
- Denominativas
- Figurativas
- Mixtas
- Auditivas
- Tridimensional
En el caso particular de Venezuela se cuenta con 50 clases de marcas, llegando a un nivel de detalle muy particular. En este sentido se mencionan:
- Materias primas o parcialmente preparadas.
- Receptáculos.
- Pieles y cueros preparados y otros que no sean prendas de vestir.
- Jabón común, fósforos, azulillo, velas, almidón, sustancias para pulir y limpiar, detergentes y demás preparaciones para el lavado y la limpieza.
- Aparatos de uso en la arquitectura y la construcción.
- Sustancias químicas, preparaciones farmacéuticas, perfumería.
- Cordelería, sacos y artículos análogos.
- Aparatos de aviación.
- Proyectiles, armas de fuego y explosivos.
- Fertilizantes y abortos.
- Sustancias tintóreas.
- Artículos para ornamentar y decorar edificios. Materiales para albañilería, asfalto.
- Artículos de ferretería y tubos de hierro.
- Metales fundidos y forjados, alambre.
- Aceites y grases que no sean para alimentos.
- Materiales y pinturas para labores del pintor, con excepción de materiales para pulir y aceites.
- Productos del tabaco.
- Maquinarias y accesorios para el uso en la agricultura y labores de ordeño.
- Vehículos, excepto locomotoras.
- Linóleos, hules y similares.
- Aparatos, máquinas y accesorios eléctricos.
- Artículos para el juego y el deporte. Juguetes.
- Cuchillería, maquinaria y accesorios que no sean eléctricos, herramientas.
- Equipos fotográficos y sus accesorios. Artículos para óptica.
- Cerraduras y cajas de seguridad.
- Aparatos y demás artículos para actividades científicas y de mensura.
- Máquinas e instrumentos para medir el tiempo.
- Artículos de joyería, joyas y metales preciosos manufacturados.
- Escobas, brochas y plumeros.
- Artículos de barro, loza y porcelana
- Filtros y aparatos de refrigeración.
- Muebles y tapicería.
- Artículos de vidrio y cristal.
- Aparatos de calefacción, ventilación e iluminación que no sean eléctricos.
- Artículos hechos de caucho y llantas de goma o caucho, estopas, correas inductoras y mangueras.
- Instrumentos para la actividad musical y accesorios.
- Artículos y útiles de escritorio. Papel, exceptuando el usado en tapicería.
- Libros y publicaciones de todo género.
- Artículos de vestir, sombreros y calzado.
- Artículos de mercería y quincallería, botones, hilos. Artículos para hacer propaganda comercial, no incluye las publicaciones.
- Bastones, paraguas y sombrillas.
- Telas en piezas, tejidos, pasamanería y bordados.
- Hilos, hilazas y ovillos y madejas.
- Útiles e instrumentos para odontólogos y médicos.
- Bebidas refrescantes (gaseosas) y agua minera, sea artificial o natural.
- Alimentas e ingredientes alimenticios.
- Vinos, exceptuando los medicinales.
- Bebidas de malta y cerveza.
- Licores alcohólicos.
- Mercancías no clasificadas y Denominaciones Comerciales.
Una vez hecho el registro de marca, su titular o propietario está obligado a usarla, siempre y cuando dicho uso guarde relación con los productos o servicios para los que fue concedido el registro. En algunos países, al comprobarse que la marca no ha sido utilizada, el Estado concede la denominada “Acción de Cancelación”, pudiendo ser solicitada por cualquier persona.
A nivel latinoamericano y más específicamente, en la Comunidad Andina de Naciones (CAN), en lo que a registro de marca se refiere, se tiene contemplada la acción de cancelación por falta de uso, estipulando que, transcurridos tres años desde la presentación de esa acción, si el titular de la marca no demuestra haber usado la misma, le será cancelada, dándole prioridad a la persona que solicitó la acción de cancelación, pudiendo iniciar su registro.
Las empresas en el mundo globalizado, se han hecho más visibles a sus clientes y proveedores, así como a sus competidores, por lo que es importante proteger los signos que distinguen los productos y servicios que comercializan, es decir su marca.
Todas las empresas se enfrentan a competidores directos, existiendo algunos inescrupulosos que se aprovechan del trabajo realizado por otros, siendo necesario e importante para cubrir ese riesgo, efectuar el registro de marca de cada uno de los productos o servicios que comercializa.